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martes, marzo 07, 2006

Desplanificación urbana

El boom inmobiliario existente en nuestra ciudad no tiene hasta ahora límites racionales. La natural y entendible tendencia empresaria a lograr máximo beneficio con el menor costo y riesgo, se topa en éste caso con un Estado completamente ausente en su rol regulador. Es así como diariamente vemos demoler en la calle Güemes sin criterio alguno viejas casonas, para reemplazarlas por espantosos locales engendrados en una tarde por algún arquitecto mediocre. De la mano de esta especulación inmobiliaria van los martilleros, ansiosos por la cobranza de una comisión por su tarea de intermediación. Es así como en la actualidad piden exorbitantes alquileres que a veces superan los $ 5.000 y lamentablemente muchas veces encuentran inquilinos inconscientes o irracionales desde una óptica económica que abonan esas sumas exhorbitantes: es así como el martillero queda feliz con su comisión y el propietario tiene la ilusión que esa renta inconcebible será de por vida.
El inmobiliario es un mercado históricamente propenso a las burbujas. Basta con recordar los adefesios creados en la década del 70: centenares de edificios de bajo presupuesto y repleto de pequeños departamentos para alquilar. La llamada “irracionalidad exhuberante” va a concluir en algún momento y los precios se reajustarán seguramente hacia abajo pero el daño ya estará hecho.
No estamos hablando acá de un conservacionismo ciego, que niegue el progreso; pero si de un crecimiento ordenado, con respeto de normas establecidas, donde no se demuelan casas que son patrimonio de la ciudad gracias a alguna ordenanza municipal sacada de apuro y que se respeten las zonificaciones y límites de altura para las construcciones Sólo así se podrá hablar de crecimiento inmobiliario y no de "burbuja" de corto plazo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tito,

Ojo con el efecto de las restricciones a la construcción. Una de las razones por las cuales la vivienda es tan cara en Europa (las otras son la inmigracion, las oportunidades que hay en las ciudades grandes, los intereses ultra bajos que promueven hipotecas y por supuesto el comportamiento burbuja), es la cantidad de restricciones y zonificaciones. Imaginese que si limitan la oferta, a donde van a ir a parar los alquileres?!...en algun momnento oferta y demanda de espacio se encontraran y fijaran un precio justo. Y sera el plan de negocios marginal...el ultimo que logre igualar sus costes marginales (incluyendo el alquiler) con los ingresos, ese fijara los precios de los alquileres en el largo plazo. Pero en el corto plazo, habra idas y venidas con los precios, exageraciones, burbujas y fiesta. Mas, como ud bien dice, los intereses estan alineados hacia los alquileres altos: propietarios y martilleros hacen su agosto. Y como le digo, mientras a alguien le entre 5000, 6000, 7000 o 1 millon en su plan de negocios, el precio se fija ahi y nunca por debajo. Por el momento, es bueno que salgan rapido locales...sino la lucha por el m2 en una calle de moda seria terrible.
El Ruso (back in Madrid)

Sibelius dijo...

Evidentemente, la multiplicación de los locales nos favore por aquella cuestión de la oferta y la demanda. Pero si la zona se deteriora y pierde atractivo, en el largo plazo pierden todos.

Anónimo dijo...

Si...igual sabe que son cíclos. Antes la calle Lavalle en Buenos Aires era un show, ahora es una mierda...pero esta Recoleta. Y despues aparece Palermo, y mas tarde se van a Puerto Madero. En Londres, Carnaby Street ya no es lo que era, y en Paris los campos Elyseos se llanan de "gentuza" (la "racaille" segun Sarkozy")que por la noche juegan al football con latitas de coca cola. La peato San Martin era, sobre todo en la intersección con la cosa, una calle de lujo con negocios de ropa caros, y los sweaters de Santiago del Estero duraron lo que un suspiro. Todo se transforma. Es lo bonito del capitalismo...

Pd: Guemes deberia tener una pagina como:http://www.carnaby.co.uk/