Coetzee dijo refiriéndose a la novela de Banks “Una americana consentida” que en este relato Liberia resultaba tan infernal como el Congo de Conrad. Conrad, Coetzee y Banks escriben sobre tres épocas y lugares diferentes de África, pero lo que encontramos en común en los relatos es la crudeza de las descripciones y el escape a las explicaciones simplistas.
“El corazón de las tinieblas” , de Joseph Conrad es una clásica y escalofriante narración sobre el colonialismo. Muestra cómo la idea de superioridad del hombre blanco y la necesidad de educar al pueblo africano, era el manto con el que se cubría el saqueo sistemático de las colonias. Por otra parte, resalta la paradoja de que lejos de Europa llevar su cultura a África, parecía acontecer lo contrario, los hombres blancos descubrían en aquellas regiones sus aspectos más oscuros y salvajes.
“La edad de hierro” de Coetzee relata la vida bajo el apartheid sudafricano, desde la óptica de una mujer blanca. La protagonista del relato es una mujer enferma –el cáncer que sufre aparece como una metáfora de la enfermedad que corroe a la sociedad- que siempre se opuso al racismo de su país, pero que encuentra que el resentimiento de los jóvenes afrikáans sólo podía conducir a su país a una situación aún más intolerable. Otro tanto ocurre con la Liberia que muestra Banks en “Una americana consentida”, sumida en un sistema económico injusto y con un gobierno obscenamente corrupto. Pero cuando la revolución gana las calles, no triunfa la equidad, sino sólo la violencia y la venganza que degrada a todos para mostrar los aspectos más oscuros de la condición humana.
“El corazón de las tinieblas” , de Joseph Conrad es una clásica y escalofriante narración sobre el colonialismo. Muestra cómo la idea de superioridad del hombre blanco y la necesidad de educar al pueblo africano, era el manto con el que se cubría el saqueo sistemático de las colonias. Por otra parte, resalta la paradoja de que lejos de Europa llevar su cultura a África, parecía acontecer lo contrario, los hombres blancos descubrían en aquellas regiones sus aspectos más oscuros y salvajes.
“La edad de hierro” de Coetzee relata la vida bajo el apartheid sudafricano, desde la óptica de una mujer blanca. La protagonista del relato es una mujer enferma –el cáncer que sufre aparece como una metáfora de la enfermedad que corroe a la sociedad- que siempre se opuso al racismo de su país, pero que encuentra que el resentimiento de los jóvenes afrikáans sólo podía conducir a su país a una situación aún más intolerable. Otro tanto ocurre con la Liberia que muestra Banks en “Una americana consentida”, sumida en un sistema económico injusto y con un gobierno obscenamente corrupto. Pero cuando la revolución gana las calles, no triunfa la equidad, sino sólo la violencia y la venganza que degrada a todos para mostrar los aspectos más oscuros de la condición humana.
1 comentario:
Muy interesante libro. Es maravilloso continente mágico y muy atractivo, yo he estado en Sudáfrica en ocasión del mundial.
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