Un libro de César Aira que me encanta es Diario de la hepatitis. Porque es un trabajo sobre nada, relacionado con reflexiones de la vida cotidiana. Sobre cosas que pensamos de manera oscura y él pone en palabras. En ocasiones, Aira inventa argumentos descabellados únicamente con el objeto de resaltar alguna ocurrencia. No en este caso, ya que el libro se construye como un diario de un escritor en el que él anota de manera aleatoria sus ideas. Gran parte de las reflexiones están relacionadas con la labor del escritor, y más específicamente, con sus pocas ganas de seguir escribiendo. Paradójicamente, este es un libro de 1993, es decir, cuando se estaba por inaugurar el período de mayor fertilidad y éxito en la carrera de Aira. Es por esto que su devenir como escritor queda frecuentemente asociado a la década menemista -aunque también por las temáticas sobre las que escribe, con hincapié en personajes que trabajan en el sector de los servicios floreciente en esta época.
Aira comenta:
"El Ulises, alguien debería decirlo, es nada. Nada en absoluto.
¡El tiempo que lleva! Es horrendo. El tiempo que le llevó a Joyce... Es como una amenaza: la profesión de novelista. Eso puede pasarle a cualquiera."
También el libro está plagado de referencias sobre los llamados temas metafísicos, como por ejemplo:
"Meditar es importante, de acuerdo... ¿Pero sobre qué? ¿Por qué todos hablan de la Meditación sin dar pistas sobre los temas? No lo entiendo. No lo acepto. Es más fuerte que yo. ¡Lo que importa son los contenidos! Grito en mi desconcierto sin objeto, literalmente sin contenido."
Otro tópico que parece agradarle son esas pequeñas dificultades con las que convivimos cotidianamente, como tomar un mapa al revés, y la sensación de que el mundo se dio vuelta cuando lo invertimos... O el leer una explicación en una enciclopedia y recordar el ejemplo, pero no el concepto, lo que torna el dato inútil...Si este tipo de observaciones no lo divierten, no tome una novela de Aira, porque son así, sólo que protagonizadas por indios que filosofan, chicos que reparten pizza que son travestis, profesores de literatura que son monstruos y muchos otros absurdos por el estilo.
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