Tokyo Blues (Norwegian Wood, en la traducción al inglés) es un libro tan universal como el tema de los Beatles que sirve de inspiración a Murakami. Vale decir, que al leer esta novela uno se olvida que es un autor japonés. Esto es así no sólo por el gusto hiperoccidentalizado de un Murakami, marcado por la literatura y la música norteamericana, sino también porque los problemas de Watanabe, el melancólico protagonista, carecen de fronteras. Se trata de un joven obligado a perder la inocencia y liviandad de la juventud tras el suicidio de su mejor amigo y la tormentosa relación que establece con la novia de éste.
El cocinero salvaje criticó Tokyo Blues aduciendo que a su juicio no había ni suficiente Tokio ni suficiente tristeza. Numerosos comentarios en el blog de Terranova aclararon suficientemente que esa crítica no es lícita porque el libro no se llama Tokio Blues. Pero más allá del equívoco con nombres, subtítulos, traducciones del japonés al inglés y del inglés al castellano, a mí me parece que los personajes recorren permanentemente Tokio. Lo que no podemos encontrar son referencias al bagaje cultural japonés. Los adolescentes que comienzan sus estudios universitarios en Tokio en 1969 parecen tener inquietudes y problemas similares a los de París o México, en una época signada por el reinado de la juventud, la rebeldía y la batalla generacional. Murakami no describe el Tokio ancestral, sino el que vivía la juventud japonesa de los ´60.
En cuanto a que no hay suficiente tristeza... Watanabe sufre el suicidio de su mejor amigo, se enamora de la novia de él que enloquece, y también de otra joven cuya madre ha muerto y tiene a su padre enfermo. Watanabe no tiene amigos, tiene muchos problemas para relacionarse, se ha encerrado en sí mismo, en sus libros y sus discos, para evitar más dolor. No se cuánta más tristeza pueda el lector aguantar.
Por último, Terranova reniega de la concepción del sexo que aparece en la novela. Los personajes parecen no poder fusionar sexo y amor. No parece que Murakami esconda tras sus historias una concepción pacata, sino simplemente la visión que un joven decepcionado y triste tiene del amor, el sexo y la vida. Tokio Blues es una novela cautivante y melancólica, plagada de relatos de vida e historias cruzadas que atrapan y pierden al lector en un bosque oscuro de corazones destrozados.
El cocinero salvaje criticó Tokyo Blues aduciendo que a su juicio no había ni suficiente Tokio ni suficiente tristeza. Numerosos comentarios en el blog de Terranova aclararon suficientemente que esa crítica no es lícita porque el libro no se llama Tokio Blues. Pero más allá del equívoco con nombres, subtítulos, traducciones del japonés al inglés y del inglés al castellano, a mí me parece que los personajes recorren permanentemente Tokio. Lo que no podemos encontrar son referencias al bagaje cultural japonés. Los adolescentes que comienzan sus estudios universitarios en Tokio en 1969 parecen tener inquietudes y problemas similares a los de París o México, en una época signada por el reinado de la juventud, la rebeldía y la batalla generacional. Murakami no describe el Tokio ancestral, sino el que vivía la juventud japonesa de los ´60.
En cuanto a que no hay suficiente tristeza... Watanabe sufre el suicidio de su mejor amigo, se enamora de la novia de él que enloquece, y también de otra joven cuya madre ha muerto y tiene a su padre enfermo. Watanabe no tiene amigos, tiene muchos problemas para relacionarse, se ha encerrado en sí mismo, en sus libros y sus discos, para evitar más dolor. No se cuánta más tristeza pueda el lector aguantar.
Por último, Terranova reniega de la concepción del sexo que aparece en la novela. Los personajes parecen no poder fusionar sexo y amor. No parece que Murakami esconda tras sus historias una concepción pacata, sino simplemente la visión que un joven decepcionado y triste tiene del amor, el sexo y la vida. Tokio Blues es una novela cautivante y melancólica, plagada de relatos de vida e historias cruzadas que atrapan y pierden al lector en un bosque oscuro de corazones destrozados.
1 comentario:
El amor, lo humano, los sentimientos y la soledad son los temas de Tokio Blues, un libro que me encantó, lo mejor que he leido en el año.
Publicar un comentario